El colapso está en proceso. Debemos crear alternativas al mundo fracasado que se autodestruye con guerras, contaminación, pobreza energética…
Hemos pasado el pico del petróleo y comenzamos a sentir en nuestras carnes las consecuencias de la crisis climática. El concepto SolarPunk nos alienta a imaginar un futuro utópico, positivista en el que los humanos por fin hemos conseguido encontrar el balance con el medio en el que vivimos y desarrollamos tecnologías que nos permiten reparar los errores que cometimos. Necesitamos más tecnologías libres, orientadas a hacer crecer la vida y no al capital, pero también tienen que ser eficientes. Debemos reducir el consumo, reparar, reutilizar y sobre todo optimizar para conseguir más con menos.
El capital y los estados saben lo que necesitan para sobrevivir: más ejército, más policía, más información de todas y de todo. El encarecimiento de la luz, la desestabilización de la red eléctrica, la escasez de los combustibles aceleran el desarrollo de una sociedad más fascista, que se extiende también por una Internet cada vez más centralizada y comercializada, arrinconando los espacios digitales más libres y colaborativos.
Podemos desintoxicarnos de las dependencias programadas hacia las notificaciones de colores y los vídeos cortos e inesperados. La comercializació digital está diseñada para cautivar nuestra atención y manipular nuestro deseo. Frente a ello, debemos replantearnos qué necesidades realmente apremian ahora y redirigir hacia ellas nuestra atención y nuestros esfuerzos para una sociedad más justa, en lo digital y en lo terrenal.
Huir de lo efímero, lo volátil, las mil distracciones simultáneas y la instantaniedad homogénea, donde todo cambia tan rápido que nunca se puede cambiar nada. Nadar contracorriente hacia la organización colectiva de la vida, con apuestas a largo, reparando máquinas y relaciones humanas, construyendo infraestructuras libertarias y cosiendo con ellas las aristas de todas las caras del poliedro de la unidad popular.
Aprovechemos y pensemos en qué podríamos hacer mejor que ya no hagamos, o en qué podríamos hacer peor para vengarnos de una realidad que se manifiesta cruda e inexorable, o bien para demostrar nuestra propia inoperancia en un acto de rebeldía.
Necesitamos más información, conocimiento, y sobre todo más sabiduría: esa que solo podemos obtener a través del contacto humano. Por eso, queremos vernos otro año más, para conspirar juntas sobre cómo armar una resistencia más organizada, a través de las redes, las digitales y las de amistad y solidaridad que nos unen y nos conectan a la vida. y que esta última solamente la extraeremos unas personas de otras, quizá con mediación de algoritmos, máquinas, y automatismos [quizá no, con organización social (offline?) nos baste]
Con cada vez menos recursos disponibles, queremos apostar porque todas podamos vivir dignamente, Tenemos el objetivo de lograr que todas las personas vivan mejor, no unas a costa de otras. Si los recursos son escasos, debemos compartirlos. El camino de la sobreproducción capitalista solo crea más desigualdad, más pobreza y más destrucción. Por eso empezamos por compartir ideas, sentimientos, valores, objetivos… y de ahí, a organizarnos masivamente en el apoyo mutuo y la colaboración para tener para todas todo. sino individualmente y en conjunto, porque si te doy una bicicleta me quedo sin nada, pero si te doy una idea, ambos nos beneficiamos. Además, no somos los únicos seres vivos del planeta. Tenemos que vivir en armonía dentro de todo un ecosistema, poblado de seres y criaturas con tanto derecho como nosotras a existir. Las soluciones tienen que ser también desde el respeto general a todas las formas de vida. y para qué aún no necesitamos buscar mucho más allá, si pues aquí abajo tenemos lío.
Debemos pensar juntas, pero sobre todo actuar coordinadamente hacia un objetivo común: salvaguardar la vida allí donde el capital solo quiere destruirnos.
El Hackmeeting abre un espacio anárquico y sinérgico en el que compartir todas estas ideas, todos estos planes, y darnos energía mutuamente para seguir con los proyectos. Sobre todo, es un espacio de resistencia contra la apatía y la decadencia del sistema que colapsa.
Retomamos el HackMeeting para colaborar, para dar y recibir ideas que nos ayuden a crear un mundo mejor. Esta vez en MolinoLab.